Inversión Socialmente Responsable (ISR)

Una inversión socialmente responsable (en inglés, Socially Responsible Investing – SRI) es aquella inversión que además de tener en cuenta la rentabilidad y el riesgo, tiene en cuenta los criterios ESG, es decir, los factores medioambientales, sociales y de gobierno corporativo. No se debe confundir con la filantropía o las donaciones ya que las ISR deben ser también rentables.

Esta filosofía de inversión se puede aplicar a cualquier tipo de producto financiero pero generalmente se articula a través de instrumentos de inversión colectiva (fondos de inversión y de pensiones).

Este tipo de inversiones, que también se se les suele denominar sostenibles, tienen como objetivo que el dinero empleado sirva para lograr un impacto positivo en la sociedad, mientras se mantiene un equilibrio respetuoso con el medio ambiente y por tanto, contribuir al desarrollo sostenible.

La Comisión Europea en el 2018 lanzó un Plan de Acción de Finanzas Sostenibles donde uno de los puntos de acción se ha traducido en la definición de una Taxonomía para clasificar que productos financieros son realmente sostenibles o «verdes» y evitar el Greenwashing o blanqueo ecológico.